Si les digo que disfrazarnos tiene mucho más trasfondo del que nos imaginamos, puede que les suene chistoso pero es la verdad. Por ello les contaré un poco acerca del movimiento gótico y como para mí tiene mucho que ver con nuestra tradición de disfrazarnos…
Toda historia tiene un comienzo, esta inicia desde los tiempos romanos. Específicamente con los "Godos", un pueblo germánico que tuvo un importante papel en la caída del imperio romano.
La utilización del adjetivo gótico en el arte medieval se utiliza más que todo para describir sus características bárbaras y toscas, comparándolas con las líneas refinadas de la arquitectura clásica. Pero no debemos confundirla con el arte de los godos.
Estos fueron los primeros rastros en la historia de la palabra “Gótico”.
A finales de los 70 y principios de los 80 se vuelve a utilizar este término pero dirigido esta vez a una sub-cultura que existe en varios países, dentro de la escena musical del rock-gótico. Este grupo intenta marcar un énfasis al individualismo, la tolerancia y el gusto por la diversidad. Se vieron influenciados por la literatura y el cine de terror y su vestimenta fue una fusión de las corrientes victorianas, con el death rock y el punk, obteniendo así un estilo andrógino que sentía atracción por lo oscuro y macabro.
El principal exponente y responsable de las connotaciones modernas del término gótico es Horace Walpole, que en su obra el castillo de Otranto lográ describir muy bien el estilo gótico. No olvidemos la influencia de "Nosferatu", el primer vampiro nacido en las salas de cine.
También podemos admirar la corriente gótica en la película The Hunger (1983), la serie la familia Adams, Beetlejuice, Batman, el personaje Rogue en Xmen, la serie El cuervo, Edward Scissorhands, entre otros.
La moda gótica se caracteriza por el color negro principalmente, la utilización de cuero, patente, accesorios de joyería religioso, el encaje, las camisas de volantes, sombreros de copa, medias panties de rejilla, corsés, guantes, pulseras y collares de pullas, tacones de aguja, botas de combate y muchas otras prendas. Algunos diseñadores de alta costura también se inspiraron en la estética gótica, en particular Alexander McQueen y John Galliano.
Se puede decir que esta tendencia se revive al mejor estilo frankenstein puesto que aún en estas épocas la cultura gótica tiene importancia entre grupos jóvenes y más todavía los 31 de octubre cuando decidimos sacar nuestro lado más terrorífico.
Les deseo un horroroso Halloween!!!
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